Ergástulos contemporáneos.

"AL ERGASTULANO LA PUERTA DE LA CÁRCEL NO SE LE HABRE SINO PARA DEJAR PASAR SU CADÁVER"...extraído de "Las Miserias del Proceso Penal" de Francesco Carnelutti...

Cambiamos las cárceles de la represión injustificada, por paraísos inexistentes llenos de información que sólo desvirtúa la verdadera escencia de aquello que cada vez se nos aleja más. Nuestra propia humanidad.

Si la escencia de todo es la evolución y desde siempre nos hemos vanagloriado absurdamente de ser el tope, el cigma de la evolución, entonces exactamente ¿hacia donde se dirige la evolución del hombre?. Porque si somos fieles a lo estudiado, entonces todo lo que el hombre realiza a diario es parte de su evolución. He de morir para saber que alguna vez viví...¿debe desaparacer todo lo que es para darnos cuenta que alguna vez tuvimos un planeta que no acogió?.

Ciertas personas siempre que llegan por vez primera a un nuevo planeta respiran profundo para sentir su olor...¿a qué huele la Tierra? ¿Cúal es el olor del hombre?

Entonces somos todos ergastulanos y la tierra es nuestra cárcel subterránea y perpetua. Por ello nos hemos olvidado de la escencia de ciertas cosas, claro para que mantener aquello que no separa de la libertad y que sólo nos dejará salir cuando muertos estemos.

Entonces inventamos materialidades que transmiten signos de placer inmediato...creamos un mundo a la medida de nuestras debilidades y sobre todo a la medida de nuestra perpetua inadaptabilidad...es más fácil morir sentado frente a imágenes que no paran, a vivir creando imágenes para nuestro recuerdo.

Demasiado rápido avanzo todo...demasiado lento reaccionamos. Ahora morimos lentamente al calor del abrazo de la estrella que nos dió la vida.

Quien vendrá a nuestro encuentro a la salida de éste ergástulo que tan evolucionadamente hemos creado, a imagen y semejanza nuestra. No somos una plaga, no somos virus. Simplemente somos humanos, el último paso de la evolución. Los elegidos para terminar con la creación de nuestra madre Eva.

Algo extraño pasa en las noches de mi desierto, un calor inexplicable, un calor desconocido, nuevo y extraño para el que ha vivido por años aquí. Mi desierto hoy es caluroso por las noches, no solía serlo. Algo extraño pasa en mi desierto.

Al ergastulano la puerta de la cárcel no se le habre sino para dejar pasar su cadáver...quien recibirá a los miles de ergastulanos que solían habitar este planeta.