Divagando en otra de las miles de noches de insomnio, encontré ésto...

Cinco minutos se transforman en una hora cuando las ganas de huir te corroen las entrañas…no puedes hacer nada más que esperar, esperar a que pase nada y tu infinitud se mantenga igual.
Cinco minutos y todo sigue igual. Debes tomar tú decisión, si acaso sigues o no.

Entonces que dices? te crees capaz de hacerlo?, si no te atreves deja tu espacio a los que si y déjate de huevadas, son muchos los quieren tu lugar y hay poco tiempo para prepararlos. Si piensas que tu responsabilidad moral y social es la cuña que te impide seguir entonces deja todo y lárgate, el único límite es no dañar a los que comparten tu espacio. Nadie es dueño de su destino, porque no existe tal cosa como el destino, el destino es el invento de los que no quieren vivir su propia vida y se conforman con vivir aquella que otro les dijo que vivieran.

Entonces qué dices? Seguimos nuestro camino? Si te sientes capaz entonces pocos eventos podrán detenernos, tampoco creas que esto es la panacea de la felicidad, esas son estupideces, la vida es dura, la vida tiene baches no alfombras de terciopelo, si no tienes las pelotas para caminar por su camino, entonces busca ayuda, grita tus penas y ahí alguien vendrá a buscarte, nada sacas con escupir al sistema porque no te deja ser libre, tu libertad no depende del sistema, depende de tu voluntad, de tu imaginación…de tu adaptación.

Entonces qué dices? Mantienes tu anarquía? Tu futuro no puede estar sobre la nada, tu cuerpo necesita energía y la sociedad en la que vives te la puede entregar, la negación del todo conduce al fracaso, la negación del todo es la aceptación de la nada, la aceptación del hecho inexistente que tú no vales nada…

Bueno y entonces que mierda dices? Seguimos viviendo? De que sirve morir si ni siquiera sabes que hay más allá, si ni siquiera sabes si existe un más allá, no sé a ti, pero a mí no me tienta la idea de ser carne de gusanos, no todavía…

Te dejo tienes mucho en que pensar, tengo que dormir, debo dormir, ya han pasado varios días y por más que intento mi sueño es esquivo, cuando lo alcanzo me rechaza, me atormenta, escupe sangre en mi cara y ensordece mi temperamento con gritos de niños sin comer, entonces despierto, mi boca siempre seca, me falta el aire…si tan sólo alguien me dijera por qué me falta al aire, entonces todo estaría bien, entonces buscaría una solución y saldría adelante otra vez. Pero nadie acude, salvo tú…hasta cuando lo harás?

He vuelto, cinco minutos se han vuelto a transformar en varias horas, los ojos pesan, la cabeza se revienta y el olor a cigarros es mi fiel compañía, evito ciertas palabras por temor a represalias y preguntas eternas con respuestas inexistentes, que se puede hacer, las ideas vuelan mientras las palabras caminan. Si no se puede atajar el impulso creativo, entonces que diablos, siempre existe en mi cabeza el mismo atajo: no se debe dañar a terceros, incluso los robots lo saben, se han escritos mundos al respecto. Pero la excepción debe existir, sin ella la regla no se confirma, así lo hemos determinado, nuestra manía por demostrar las cosas que existen nos hizo crear esta absurda premisa por la que hoy me siento incapaz de escribir acerca de nada, porque sé que aunque mi límite y mi cota son claros, de una u otra manera alguien se verá afectado.
Entonces qué hacer? rehuir de lo que me gusta?, obviar el hecho que no puedo evitar?, dejar que mis dedos sigan ocupándose en cigarros cuando lo que quieren es jugar con las teclas y vomitar historias con y sin sentido?

Agallas, cojones, huevos, pachorra y un montón de apelativos más que se pueden traer hasta aquí para expresar mi pereza y mi cobardía de buscar algo que escribir. Pero no cesaré en el intento, no lograrlo es morir y morir no está en mis planes, mi muerte jamás dependerá de mis manos, la vida me tiene aquí y la vida decidirá cuando he de partir.